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Como se vio en el capítulo anterior, aparte de las octavas los tonos armónicos con más presencia en todos los instrumentos se corresponden con los intervalos de 3M y 5, y ello es por el simple motivo de que estas tonalidades son las que guardan las relaciones matemáticas más sencillas respecto de la tónica.
Como se vio en el capítulo anterior, aparte de las octavas los tonos armónicos con más presencia en todos los instrumentos se corresponden con los intervalos de 3M y 5, y ello es por el simple motivo de que estas tonalidades son las que guardan las relaciones matemáticas más sencillas respecto de la tónica.
Si tomamos un instrumento capaz de ejecutar varias notas simultáneamente (piano, guitarra, etc.) y tocamos simultáneamente una nota, su 3M y su 5 se produce un hecho notable: estas notas refuerzan los armónicos de 3M y 5 de la tónica, lo que además de cierta alteración en el timbre del instrumento da lugar a un sonido pleno, rotundo, expansivo. Esta construcción 1 - 3M - 5 se denomina acorde natural o acorde mayor y es el punto de partida de la disciplina que llamamos armonía.
Olvidándonos ya del fundamento físico del acorde mayor, se observará que está constituido por la 1ª, 3ª y 5ª nota de la escala mayor. Generalizando se plantea la posibilidad de hacer lo propio con la escala menor; puestos a ello, se obtendrá: 1 - 3m - 5; esta construcción, que sólo difiere del acorde mayor en la 3ª (3m en vez de 3M) se denomina, lógicamente, acorde menor. Este acorde no produce el refuerzo del armónico de 3ª de la tónica, lo que le da un carácter más lúgubre.
Generalizando aun más, se podrían desarrollar todos los acordes correspondientes a los siete modos de la escala mayor simplemente tomando las notas 1ª, 3ª y 5ª de cada modo. Este desarrollo armónico de la escala mayor da lugar a lo siguiente:
Modo I : 1 3M 5
Modo II : 1 3m 5
Modo III: 1 3m 5
Modo IV : 1 3M 5
Modo V : 1 3M 5
Modo VI : 1 3m 5
Modo VII: 1 3m ♭5
Obsérvese que los modos I, IV y V producen acordes mayores (tienen 3M) y los modos II, III y VI producen acordes menores (tienen 3m). El modo VII es peculiar, se trata de un acorde menor (tiene 3m) pero su quinta no es justa, sino disminuida; por este motivo se le llama acorde disminuido.
Una forma alternativa de describir los acordes, que en ciertos contextos resulta conveniente, consiste en verlos no como intervalos respecto de la tónica sino como intervalos entre notas sucesivas. Desde este punto de vista los acordes consisten en una acumulación de terceras: de tónica a 3ª, una tercera; de 3ª a 5ª, una tercera. Los acordes que hemos visto serían por tanto:
Acorde mayor : 3M, 3m
Acorde menor : 3m, 3M
Acorde disminuido: 3m, 3m
La denominación empleada para los acordes consta siempre de un nombre, su nota tónica, y un apellido que determina el tipo de acorde; estos apellidos varían entre distintos autores, publicaciones y escuelas. Yo propongo, y en lo sucesivo me ceñiré a ello, la siguiente (como ejemplo, lo aplicaré siempre a do):
Do mayor : Cmaj (o C, a secas)
Do menor : Cmin
Do disminuido : Cdim
A continuación se plantea la posibilidad de añadir más notas a los acordes: ¿por qué no seguir acumulando terceras aprovechando más notas de la escala? Agregando una tercera adicional tendríamos un acorde constituido por las notas 1ª, 3ª, 5ª y 7ª de la escala mayor; a este tipo de acorde, para distinguirlo del anterior, se le llama acorde de séptima. Y aquí es donde empezamos a entrar en el paisaje armónico del Jazz, porque en este estilo los acordes de quinta casi no se usan: su sonido se considera más bien plano, poco matizado y armónicamente pobre. Muy pocas composiciones en el Jazz usan acordes de quinta, y cuando lo hacen es habitual sustituirlos por sus correspondientes de séptima.
A la faena: el desarrollo armónico de la escala mayor produce los siguientes acordes de séptima (se indican sus intervalos respecto de la tónica y su sucesión de terceras):
Modo I : 1 3M 5 7M (3M, 3m, 3M)
Modo II : 1 3m 5 7m (3m, 3M, 3m)
Modo III: 1 3m 5 7m (3m, 3M, 3m)
Modo IV : 1 3M 5 7M (3M, 3m, 3M)
Modo V : 1 3M 5 7m (3M, 3m, 3m)
Modo VI : 1 3m 5 7m (3m, 3M, 3m)
Modo VII: 1 3m ♭5 7m (3m, 3m, 3M)
Los modos I y IV dan lugar a un acorde que tiene 3M y 7M. A este acorde, en ámbitos clásicos, se le denomina acorde mayor con séptima; como en el Jazz, insisto, los acordes de quinta casi no se usan en lo sucesivo le llamaremos simplemente acorde mayor y lo representaremos por C∆ (la denominación Cmaj7 es también bastante común).
Los modos II, III, y VI dan lugar a un acorde que tiene 3m y 7m, al que tradicionalmente se denomina acorde menor con séptima; para nuestros propósitos acorde menor, a secas. Lo representaremos por C- (las denominaciones C-7 o Cmin7 son también comunes).
El modo VII, recordemos, producía el acorde disminuido, consistente en dos 3m. El nuevo acorde añade sobre estas una 3M, motivo por el cual se le llama acorde semidisminuido. Lo representaremos como C∅. Esta notación es bastante común, pero en algunos textos y partituras, por limitaciones tipográficas, se suele denotar como C-♭5, C-7♭5 o Cmin7♭5.
Finalmente, el modo V produce ahora un acorde peculiar; consta de una 3M y una 7m, motivo por el cual no se puede considerar ni mayor ni menor. Tradicionalmente se le llama acorde de séptima de dominante, simplemente por ser un acorde de séptima construido sobre el grado 5º, o dominante, de la escala. En el ámbito del Jazz se le suele llamar dominante, a secas. Lo representamos como C7.
Es una simplificación excesiva y empobrecedora, pero si tuviéramos que aislar un único acorde como característico del Jazz, este sería el acorde dominante. Este acorde tiene una serie de características que lo hacen único:
- Su condición de mayor y menor simultáneamente le da un carácter ambiguo, flotante, líquido.
- Contiene un tritono, entre su 3ª y su 7ª. Esto lo hace bastante disonante, y la disonancia es uno de los elementos identificativos del Jazz.
- Por los dos motivos anteriores, admite bastante bien alteraciones y tensiones, lo que abre muchísimas posibilidades en la improvisación armónica, como se verá en su momento.
Mayor: C∆ : 1 3M 5 7M (3M, 3m, 3M)
Dominante: C7 : 1 3M 5 7m (3M, 3m, 3m)
Menor: C- : 1 3m 5 7m (3m, 3M, 3m)
Semidisminuido: C∅: 1 3m ♭5 7m (3m, 3m, 3M)
Y la regla práctica, ésta:
- El acorde dominante se obtiene bajando un semitono la séptima del acorde mayor correspondiente. Esto es: C7 se obtiene bajando un semitono la séptima de C∆.
- El acorde menor se obtiene bajando un semitono la tercera del acorde dominante correspondiente.
- El acorde disminuido se obtiene bajando un semitono la quinta del acorde menor correspondiente.
Esta regla, que se deduce sencillamente mirando la definición de los acordes en la tabla anterior, es útil a la hora de deducir la digitación de cierto acorde en un instrumento.
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